A primera vista la mezcla de estilos choca. Esta sensación se va difuminando a medida que nos acomodamos en la guitarra. Hay que recordar que se trata de un modelo "custom" según las especificaciones exactas del cliente. Vamos a por ello.
La LUTHIER RUIZ SG HIBRIDA es una SG con mástil atornillado tipo Strat y pala tipo Ibanez. La guitarra es sólida, ligera y no cabecea. Desenchufada ya apunta maneras con una buena vibración tanto en el cuerpo como en el mástil.
Mástil.
Nada que ver con lo que la estética de la pala, de construcción "scarf joint", nos podría sugerir. El mástil de tres piezas de arce nos ofrece un perfil C moderno muy cómodo, ni grueso ni delgado, y con un ancho en cejilla de 43 mm. Con una escala de 24,75” y un radio 9'5 permite tanto tocar a lo Hendrix, entrando el pulgar en el diapasón, como correr en las zonas más agudas.
La unión mástil-cuerpo sustituye la típica placa por casquillos independientes para cada tornillo, dejando la zona más libre y cómoda. En uno de estos tornillos encontramos uno de los botones de la correa, ambos con cierres de seguridad.
Las clavijas selladas soportan perfectamente la afinación gracias también a una cejilla de hueso pulcramente tallada. La guitarra viene encordada con un calibre 10-46 que la lleva hacia un sonido sólido y una velocidad moderada.
Cuerpo.
De dos piezas de caoba y perfectamente acabado en nitrocelulosa color "Alpine White" ofrece un tono cálido y equilibrado en frecuencias. En el puente siguen las mezclas y nos encontramos con un híbrido entre un puente tipo Gibson en el tema selletas (tune-o-matic) con las cuerdas atravesando el cuerpo como en una Telecaster. La salida escalonada e inclinada de las cuerdas le da un aspecto muy personal al conjunto, favoreciendo la resonancia y la entonación.
Eléctrónica y sonido.
La LUTHIER RUIZ SG HIBRIDA viene equipada con dos pastillas humbucker de baja salida hechas totalmente a mano.
Tenemos un control de volumen por pastilla, un control de tono general y el habitual selector de perilla en color negro. Se ha sacrificado uno de los tonos por un vistoso "killswitch" rojo. Los knobs transparentes le dan un toque elegante, entre clásico y moderno.
Las pastillas son otra cosa. Si eres de los eternos buscadores de ese matiz cremoso entre el limpio y el overdrive, esta puede ser tu guitarra.
Probamos la guitarra con un amplificador Fender Deluxe Reverb Tone Master, con una simulación de válvulas muy digna, y un pedal de overdrive T-Rex Alberta.
La pastilla de puente tienen una claridad y definición por cuerda en los acordes que solo encontramos en guitarras que cuestan varias veces más y con overdrive ofrece un crunch exquisito, nada chillón y con riqueza de medios. Los riffs muerden y los acordes se entienden perfectamente. Engancha.
La posición central tiene muy marcado el sonido acampanado típico de este estilo de guitarra. Unos arpegios, un punto de reverb y los armónicos se disparan. Con el overdrive adquiere una cierta nasalidad muy interesante para el fraseo más expresivo.
En la posición del mástil sorprenden el cuerpo y los graves, nada pastosos, más propios de guitarras más voluminosas. Podemos ir de la Bossa Nova a los solos sureños con un suave overdrive sin problema.
Jugando con los controles de volumen y tono aparecerán nuevas guitarras en cualquiera de las tres posiciones, siendo una guitarra relativamente dócil para el rasgueo dada la baja salida de sus pastillas.
Conclusión.
La LUTHIER RUIZ SG HIBRIDA es una guitarra muy rockera y versátil, con una paleta de sonidos muy amplia y unas pastillas de las que no te podrás separar. La mezcla de un tacto tipo Strat con el expresivo timbre de las humbuckers ofrece interesantes posibilidades sonoras. Una opción calidad-precio que vale la pena barajar y en la que podrás personalizar hasta el último tornillo. Y es que nada sienta mejor que un traje a medida.
JORDI EGEA
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